Blog Amycos

Voluntariado Internacional y Servicio de Voluntariado Europeo

Betania, una experiencia vital

11 julio, 2011

Sábado, 7,30 de la mañana, montamos en la furgoneta dirección Barrio San Judas para recoger a Indiana, la que será nuestra guía acompañante durante todo el fin de semana. Indiana es una fiel colaboradora de Amycos, experta en intervención social en los asentamientos a los que nos dirigimos.

Antes de comenzar nuestro viaje, paramos a desayunar en Kmañek (Ventita de Pancho). Y probamos el famoso Gallopinto nicaraguense para tomar fuerzas. El gallopinto es arroz con frijoles: un desayuno contundente.

Nuestra primera parada fue en la comunidad de Nueva Soledad. Allí nos recibieron varias familias, las cuales habían sido beneficiarias del apoyo de Amycos para la construcción de sus viviendas.

Nos contaron como su antigua comunidad fue destruida en 1998 por el devastador Huracán Mitch. Cuentan que, tras un mes de intensas lluvias, el Volcán Casitas se llenó, provocando un deslave, el cual arrolló todas las “champitas” (chabolas) que encontró a su camino, causando numerosos destrozos y miles de muertes.

Ante este desastre natural y humano, Amycos les apoyó en la adquisición de nuevos terrenos para la construcción de sus viviendas, asentadas en lugares más seguros.

Tras realizar una amigable y acogedora visita por sus casas y, después de tomar un refrescante batido de cacao, nos despedimos de la comunidad con una piñata, la cual provocó grandes sonrisas en los niños y niñas.

Otra comunidad visitada, afectada con la misma problemática, fue Nueva Jerusalén. Allí nos recibieron con un simpático juego que nos permitió encontrar a “nuestro amor”.

Para finalizar el día, llegamos a la comunidad de Betania, donde nos recibieron numerosos niños y niñas con una pancarta de bienvenida y una gran fiesta con mucha música y mucho baile. Por nuestra parte, quisimos corresponder a tanta hospitalidad y la brigada Amycos debutó con unas jotas castellanas acompañadas de una afinada dulzaina y castañuelas.

Después de descansar en hamacas al aire libre, a las 6,30 de la mañana distintas familias nos acogieron en sus casas para poder darnos una ducha y tomar un buen desayuno.

Entre juegos, con encierro de San Fermín incluido, y piñata nos despedimos de Betania para almorzar y pasar la tarde en la ciudad colonial de León, donde conocimos a Azucena, colaboradora de Amycos en la Comunidad de Las Tablas, la cual visitaremos más adelante.

A pesar del gran calor y el cansancio, la intensidad de todo lo vivido, ha hecho que cada una de las comunidades visitadas se haya quedado con un trozo de nuestro corazón.

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