Blog Amycos

Hola a todos y todas os/ as parceiros/as!!!!

Ya ha pasado un  poquito de tiempo desde la última vez que escribí, ¡¡y por supuesto hay mucho que contar!!!!!

A medida que han pasado los días e incluso los meses todo ha mudado mucho.

Por ejemplo, tenemos entre nuestras filas a un nuevo compañero de Turquía, Ylmaz, con el que es difícil comunicarme, ¡pero nunca imposible! Tengo mucha complicidad con él y estoy muy contenta de que también forme parte de nuestra familia.

Como dije en la última entrada, es difícil organizar los acontecimientos cuando son tantos, pero vamos allá:

Ser voluntaria es una auténtica montaña rusa. Quiero decir que, por ejemplo, en el trabajo que hago he pasado por fases diferentes. La última vez que escribí no pude darles una opinión concreta del trabajo que hago puesto que era muy pronto. En esta entrada me gustaría enfocarme en este tema porque considero que es el proceso más importante por el que he pasado hasta ahora.

Las primeras semanas de trabajo podrían definirse en dos palabras: “totalmente desubicada”. Es decir, no sabía bien en qué podía ser útil, qué tareas convenía más hacer, si los usuarios entendían mi portugués chapurreado…  Básicamente todo era una interrogación.

Con el paso de las semanas he conseguido entender mucho mejor a las personas que trabajan conmigo y para las que trabajo. Siento que poquito a poco me estoy integrando en el equipo y ya he aprendido cosas que nunca antes había hecho.  Por ejemplo he dado baños a los idosos (persona mayor cariñosamente hablando), he cocinado, he colaborado en la organización de algunos eventos, realizado acompañamientos con los usuarios…  Voy poco a poco aplicando el portugués que aprendo y conociendo cómo funciona el sistema portugués de servicios sociales (importante en mi profesión). Y por supuesto ahora tengo más de un abuelo y abuela <3

El próximo mes se presenta interesante. Estoy terminando de redactar mi proyecto, que a grandes rasgos, trata de elaborar historias de vida de las personas mayores del centro para posteriormente transcribir las narraciones de las cuales son protagonistas e incluirlos como criterio de investigación para elaborar un instrumento de evaluación de la calidad de vida de los usuarios. Otra forma de enlazar el proyecto EVS con el que me propongo, es analizar también cuáles son las diversidades que se deducen de los relatos (orígenes, cultura, experiencia de vida…).

Bien, hasta ahí el trabajo.

Mi compañero David ya comentó el tema de Guimarães así que voy a saltar rápidamente a otro que me encanta…

¡VIAJAR! De la montaña que comentaba, es sin duda la cima, el pico más alto. Los fines de semana que podemos nos dedicamos a movernos un poquito. Nos gusta especialmente Porto pero aún tenemos que investigar mucho de Portugal.

Uno de los que hasta ahora hicimos fue a Galicia, aprovechando la cercanía e, incluso cuando nos pilló la ciclogénesis de lleno, fue ma-ra-vi-llo-so.

La próxima semana voy a hacer un tour con mi amiga Buket, así que para la próxima entrada tendré fotos magníficas que mostrarles…

Por ahora dejo algunas de mis preferidas.

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