Hasta pronto
30 noviembre, 2018
Pues si, parece mentira pero mi estancia en Bolivia llega a su fin. Un mes que ha pasado como un suspiro. Creo que fue ayer cuando me fue a buscar Rolo al aeropuerto, sin saber muy bien lo que me esperaba ni a donde iba.
Es muy pronto para hacer balance, creo que hay que dejar pasar unas semanas para asimilar lo vivido y sacar conclusiones. Personalmente ha sido una experiencia inolvidable por la oportunidad de compartir momentos en comunidades a las que difícilmente podría acceder de otra manera, ver esos paisajes de la montaña que rodea Cochabamba, trabajar junto a los compañeros de Anawin en condiciones fuera de todo lujo y comodidad, mis compañeras voluntarias con las que compartí piso en Cochabamba…
Siempre viene bien salir de la zona de confort, plantearse retos y enfrentarse a los prejuicios. Eso por lo menos es lo que me llevo.
Dejo Bolivia con ganas de volver. Me quedan muchos sitios por conocer, apenas he podido hacer turismo. También con la curiosidad de como será dentro de unos años, con una sociedad joven con ganas de prosperar, con mucho por hacer pero con ilusión. Me gustaría volver a Morochata, Kochimayu, Tablamayu y San José algún día y si no es posible seguro que futuros voluntarios que vengan a Cochabamba me contarán como lo han visto y los compañeros de Amycos y Anawin me dirán como va todo.
Así que hasta pronto, Bolivia.