TOURS, ¡CUÁNTA INTENSIDAD!
5 octubre, 2023
Hola lectores de AMYCOS !
Mi nombre es Sara de Frutos, y después de un intensísimo mes en Tours, Francia, procedo a contaros un poco de mi vida aquí.
Por poneros un poco en contexto, tomé la decisión de realizar este voluntariado 3 semanas antes de venir y prácticamente no tuve tiempo para prepararme psicológicamente. Sin embargo, creo que esto mismo ha sido una de las cosas más positivas: venir sin expectativas – ya que no tuve apenas tiempo de crearlas – y sorprenderme con cada detalle que me he ido encontrando aquí ha sido una parte muy importante de mi adaptación.
En cuanto llegué, Astrid, de mi asociación de acogida me recogió en la estación, me llevó a mi nuevo piso y me proporcionó todo lo necesario para empezar a instalarme. En seguida, Magali, de la asociación con la que trabajo, contactó conmigo para ponerme al día sobre el proyecto, nos reunimos con mis futuros compañeros de trabajo y me sentí muy acogida. Por otro lado Alessandro, de la asociación de envío AMYCOS, también ha estado pendiente de mi y mi adaptación. Como veis, no he podido tener mas suerte con las personas encargadas de mi durante este viaje.
Respecto al proyecto, estoy trabajado con una asociación socio-cultural llamada Courteline. Concretamente en el departamento de “LOISIRS”. Soy la ayudante de la profe de arte, y durante las tardes trabajo con ella en actividades extraescolares para niños. Sin embargo, por las mañanas estoy en un despacho, donde los primeros días estuve gestionando mi incorporación; pero en cuanto comenté que me gusta el diseño gráfico he pasado a ser la encargada de la comunicación, diseñando invitaciones, carteles, etc.
Tampoco me gustaría despedirme sin contaros un poco las cosas menos positivas de la experiencia. Mi principal dificultad aquí ha sido el idioma, al principio puede ser un poco agobiante. Recuerdo la reunión que tuvimos en la residencia 2 días después de mi llegada. Empezaron a explicar las normas de convivencia y fue horroroso: no me enteraba de nada y solo quería irme a mi habitación. Pero es completamente normal ¡Solamente llevaba aquí 2 días! Ahora habiendo pasado más tiempo, no es todo tan negro como lo parecía en aquel momento, tu oído se va acostumbrando, vas aprendiendo cosas y palabras nuevas, y la gente suele ser muy comprensiva contigo.
Por ultimo, mencionar que la compañía que tengo aquí también es una parte muy importante de la experiencia. He conocido a un grupito de chicas españolas que están de Erasmus en Tours, con las hacemos un montón de planes. También el resto de voluntarios que viven conmigo han sido muy acogedores, aún estando en proyectos diferentes.
En resumen, ha sido un primer mes muy intenso, con mucha información que asimilar, y muchas emociones todas de golpe. Pero no puedo estar más contenta con la decisión que he tomado. Presiento que va a ser una etapa de mi vida de esas que no se olvidan nunca.
Gracias por leerme, y ya os iré contando cómo evolucionan los meses aquí. Un abrazo grande.