El miedo no nos deja realizar los sueños que queremos. Pero si tu sigues a tu corazón y haces lo que quieres y lo que sientes todo va a salir bien. Sentir miedo es normal pero es necesario, para hacerlo con más ganas y entusiasmo.
Yo ates de emprender este camino lo sentí, de hecho fue uno de los sentimientos que invadían mi cuerpo. Pero yo sabía que no podía dejar que este miedo me frenará por eso decidí cumplir mi sueño, romper con el miedo y las barreras y viajar a Burgos, España.
Una vez aquí la organización de Amycos me recibió, me ayudo proporcionándome alojamiento y todos lo que necesitaba para realizar mi voluntariado. En mi voluntariado realicé diferentes actividades como por ejemplo trabajé en una huerta ecológica en la que aprendí mucho ya que es una nueva forma de vida con alimentos fuera de procesados y naturales. Las personas que se encargan de la huerta y de nosotros son muy amables y risueñas. Además también trabajo en un comedor social en que he convivido con diferentes personas que me han ayudado a ver la vida con otra perspectiva y me han servido para aprender a valorar diferentes puntos de vista.
Estoy muy agradecida ya que gracias a esta organización además de cumplir mi sueño de realizar un voluntariado fuera de mi país he conocido gente maravillosa no solo con la que he trabajado si no con la que he vivido y convivido y me llevo para toda la vida, gente que podría considerar amiga.
Hola a todos, ¿Qué tal?
Cuando los cuatro cooperantes que estamos en Bolivia nos pusimos en marcha con el pequeño proyecto Aquí pintamos tod@s! no esperábamos esto:
Estuvimos en el El Espino, donde con un pequeño vídeo en el que invitábamos a la gente a mandar pequeñas aportaciones para pintar el cole y hacer distintas reformas que eran más que necesarias! La acogida de la propuesta fue muy muy buena, y nos enviaron el dinero suficiente como para:
– Pintar todas las aulas y exteriores
– Poner nuevos cristales donde no había o estaban rotos
– Sistema eléctrico en todas las aulas
– Compra de un horno para la mejora de su alimentación
– Elaboración de un parque con material reutilizado
– Comprar material de construcción para tapar grietas y desperfectos: Cemento, Yeso y tejas
– Material educativo
Pero lo mejor de todo esto, no es que consiguiésemos la financiación para realizar esto, sino que lo hicimos entre todos, alumnos, profes, mamas y papas… era un ambiente colaborativo, en el que cada profe con sus alumnos pintaban su clase, dando rienda suela a su imaginación.
Sin duda ha sido una experiencia única y que jamas olvidaré, además coincidió con la fecha de mi cumpleaños, donde los profes me hicieron una tarta muy buena, me cantó todo el colegio el cumpleaños feliz… fue genial!
Y sin duda no podía haber una mejor manera de finalizar nuestra estancia aquí que con esa semana en El Espino, con gente tan maravillosa…
¡Nos vemos pronto en España!
Los días van pasando y ya casi estoy en el ecuador de la experiencia. Realmente no me creo que hayan ya pasado tantos días. Porque cada día es una nueva vivencia y aprendizaje. En el internado he realizado diversos talleres durante las semanas que he ido ya. Por la mañana con las trabajadoras del internado organizamos y establecemos las actividades que se llevarán acabo en el día. Y coordinamos de acuerdo a las necesidades que se nos van presentando.
Por ahora he trabajado los siguientes objetivos:
-Construir las normas y reglamentos de convivencia dentro el internado.
-Generar y pautar un espacio de comunicación y respeto diario.
-Empoderar a los estudiantes ante las responsabilidades del cuidado y organización del propio internado.
-Reconocer al otro como alguien merecedor de los mismos derechos.
-Participar en igualdad de oportunidades.
-Aumentar el sentimiento de identidad grupal.
Y una actividad que me gustaría compartiros es la realización de un cortometraje sobre el cuidado del medio ambiente. La verdad que al principio la vergüenza de ponerse ante la cámara no les dejaba dar el primer paso, pero al final el resultado fue súper estupendo. Espero poder compartir ese material audiovisual dentro de poquito gracias a la elaboración de Adrián.
Dentro del internado las condiciones de alimentación no son muy óptimas por lo que se llevó acabo un taller de alimentación en el que los estudiantes por grupos realizaron unas brochetas de frutas y una ensalada. Con ello realizaron un material con las propiedades de las frutas y verduras que se les habían asignado y luego pudieron compartirlo con sus compañeros. Al final cenamos todos juntos y disfrutamos de una cena sana y equilibrada. Me encantó verles disfrutar de esa manera y promoviendo de una manera lúdica un cambio en los hábitos de alimentación. Siento no escribir más a menudo pero la verdad es que no paramos cuando no es el internado, es en otras comunidades con los diferentes proyectos. Un abrazo compañeros¡¡
Primer contacto con una realidad especialmente enriquecedora 🙂
Llegó el día 27 de septiembre y sumergida en un mar de nervios los primeros pasos, olores y paisajes en Cochabamba eran una realidad. Mi nombre es Lara y gracias a la beca Jóvenes Solidarios puedo estar participando con la entidad Anawin en Bolivia, Cochabamba.
Un equipo dotado de grandes profesionales que dan cobertura a las necesidades de las comunidades indígenas. Abordando el área de potabilización de agua, soberanía alimentaria, empoderando a la comunidad desde un enfoque biopsicosocial. La verdad que no sabía exactamente qué podía esperarme por aquí pero no creo que nunca hubiese imaginado esto. Porque la realidad supera cualquier expectativa. Las 3 primeras semanas las he compartido con Luzma geógrafa y trabajadora de la Junta de Castilla y León, compañera de aprendizajes en nuestros primeros pasos por Cochabamba y las comunidades. Además contamos con la presencia de nuestros 3 mosqueteros Asier, Daniel y Adrián.
En estas primeras semanas he podido ser partícipe de diferentes reuniones del comité de agua, donde los miembros de las comunidades se organizan de una manera envidiable. Esforzándose cada día para mejorar su situación siempre con el apoyo de Anawin para crear ese vinculo de compromiso con su propia realidad y generar una conciencia de cambio. Asistir a las grabaciones de cortometrajes de nuestro comunicador social, rey de la cámara, acción y cooperación. Aumentado mis conocimientos de ingeniería civil gracias a Dani y Asier y cómo no conociendo Bolivia a través de Rolo y Miriam. Horas de viajes para llegar a nuestros destinos que nos acercan a grandes reflexiones y a la pachamama.
Mi función como educadora social ha sido diseñar un plan de trabajo para los meses de octubre y noviembre para dar apoyo psicopedagógico y realizar una intervención comunitaria en el internado de Punacachi, donde 30 escolares de diversas edades conviven de lunes a viernes.
No hay nada como sumergirse en su vida cotidiana para poder entender y apreciar muchos valores e intereses que no corresponden con nuestra realidad más cercana. Poder compartir espacio de trabajo con un equipo multidisciplinar es genial y trabajar en contextos donde los recursos no abundan potencia la creatividad y el aprovechamiento de cada oportunidad.
El gran abanico de actuación que ofrece Anawin te ofrece oportunidades continuas de formación, aprendizaje y sentir la esencia del país. Los días pasan y eso significa que el futuro pensado se convierte en un presente continuo. Ahora solo queda seguir aprendiendo, disfrutando de mis grandes compañeros y amigos, exprimir cada vivencia y sonreír ante las oportunidades que se nos ofrecen cada día.
Descubrir como mejorar el planeta o las condiciones de muchas personas que hoy día sufren, pensar con los niños que soluciones podemos encontrar para que otros niños tengan el derecho a estudiar, ¿todo eso se puede realizar jugando? ¡Claro que sí!
Con amycos hemos realizado un juego de la oca sobre el tema de los objetivos de desarrollo sostenible.
Estos objetivos, 17 en total, han sido propuestos por las Naciones Unidas en 2015, una vez terminado el periodo de los objetivos del Milenio, 8 en total.
Los niños podrán conocer ese tema a través un juego de la oca, modificado, con lo cual, pueden descubrir los 17 objetivos en sus detalles, que es una cumbre internacional, que existen personas que realizan negocios dañando naturaleza o pueblos etc. etc.
Los niños tienen también la posibilidad de expresar opiniones o proponer soluciones para ahorrar energía, para no contaminar la naturaleza, o para solucionar conflictos con las otras personas.
Adaptando el juego y los datos según la edad de los participantes María, una chica que está realizando aquí en Amycos las practicas del master, y yo, estamos realizando los talleres en todos los centros cívicos de Burgos.
Durante estos talleres hemos visto como muchos niños conocen mucho sobre la naturaleza, sobre cómo ahorrar energía o como no contaminar el planeta.
A pesar de su joven edad, la mayoría sabe que, para ahorrar energía en casa, es muy importante apagar la luz de una sala, cuando ya no la necesitamos; saben que es importante cerrar el grifo cuando no se necesita más agua o finalmente, que es importante utilizar las papeleras para la basura.
Tal vez muchos adultos tendrían que escucharlos y seguir sus sugerencias.
Los niños, para terminan el taller, solemos realizar unas mini escenas, con las cuales, los niños se trasforman en jóvenes actores y escenifican los objetivos y posibles soluciones a los problemas.